Muxeidad es sinónimo de valor

Muxeidad es sinónimo de valor.

Al enfrentarse a una sociedad homofóbica, que lacera, que juzga sin conocerte.

Esta fotografía fue la que me convirtió en viral hace más de un año y me gustaría compartirles la experiencia y cómo es que me cambió la vida.

Todo esto inició por la curiosidad: "¿Qué se sentirá usar una enagua, un huipil, trenzarse y salir maquillada a la calle como una tehuana empoderada?”, al menos tan solo una vez.

Esta curiosidad tuvo sus cómplices, mi hermano Eduardo me ayudó a buscar la indumentaria y colocarme ese tocado hermoso al estilo Frida Kahlo; Samantha Zarate me hizo un maquillaje espectacular, de hecho mi primer maquillaje, tanto mi impresión que no me reconocí al espejo.

La primera lente que me retrató fue Daniel Gómez, que anteriormente ya había hablado con él, quien inmediatamente le encantó la idea.

Tanto el tocado como el maquillaje se llevo casi dos horas, y en cuánto salía del estudio, tengo que confesar que traía toda la vergüenza del mundo porque tenía mucho medio del “qué dirán”, pero justamente al poner un pie en la calle, una camioneta pasa a lado mío y grita a los cuatro vientos “¡Qué guapa te ves!”, tan sólo me iban y venían los colores del rostro, pero en el fondo, ese fue el empujoncito para no rajarme.

Así que llegamos a Jalatlaco, ya Daniel estaba ahí preparando la cámara, estaba nublado y era víspera del día de la Guadalupana, así que se sentía el clima invernal. Me puse la enagua sobre el pantalón, porque hasta para eso tenía pena y empezamos a caminar por las calles, buscando fachadas coloridas y poses bonitas; en ese momento sentí que era mi verdadero yo y lo disfruté muchísimo; entramos a un bar que se llama El Armadillo Negro, donde hicimos las últimas fotos y muy amable el señor de la barra me brindó un mezcalito para desestresarme.

Terminamos la sesión como a las siete y media de la noche, me desmaquillé, sin embargo me dejé el tocado, porque lo amaba, no sabía que esto me iba a cambiar la vida.

Al día siguiente, asistí a mi trabajo, en ese entonces estaba en una cafetería dentro de un gimnasio. Al revisar mi celular veo que entraban notificaciones de manera extraordinaria, entonces una amiga me habla por teléfono y me felicita, yo le pregunté a qué se debía, y ella me contesto, por tu maquillaje está increíble. Y cuando me di cuenta, en redes sociales se filtró una foto del estudió que detonó la bomba.

Muy pocos saben que mi intención de esas fotos era guardarlas para mí, quizás imprimirlas y hasta ahí; sin embargo al ver la cantidad de gente que ya había visto la foto del maquillaje, tuve que hablarle a Daniel y pedirle que me diera una foto para poder subirla a Instagram y coloqué una parte de un poema de Elvis Guerra, y bueno… la historia se cuenta sola.

A más de un año de mi “transformación”, tengo que confesarles que no ha sido fácil porque a pesar de haberme liberado de un peso de encima y realizarme cómo soy, he sentido en carne propia la discriminación y la homofobia, incluso perdí un trabajo porque decían que no “contrataban modelos”. Sin embargo, siento la responsabilidad de ser la voz de quienes no pueden ser ellos mismos, ahora llevo esa voz de coraje y libertad que merecemos todos, porque en este mundo machista, el muxhe transgrede el sistema patriarcal.

Muxe es una palabra, que donde estés y quien te la explique su significado cambiará y mucho, Sinónimo de orgullo o palabra antisonante para decir que eres puto. Como sea MUXE es más que un huipil y maquillaje en un hombre. MUXE es vivir tres virtudes, más allá de todo; la primera es vivir tu dualidad con gracia, aceptar y dejar fluirte entre ambos géneros; la segunda es afrontar con valentía un áspero mundo; y la última es llevar tu indumentaria que te da tu identidad con orgullo, en tu porte, vestir y actuar.

No me arrepiento de este cambio.

📷 Daniel Gomez

💄 Samantha Zarate